Buena noche tengan todos ustedes :) o quizá día dependiendo de donde se encuentren. La luna está en el cielo en el lugar donde me encuentro, casi no se ven las estrellas debido al cielo nublado y hace un frío que me hace querer enterrarme en mis cobijas y no salir de la cama por varias horas.
En fin, ayer tratando de encontrar inspiración para un trabajo, ya que mi musa, la música, se rehusó darme tal servicio jaja, me la pasé leyendo las entradas que he publicado desde el inicio de este blog. Dos años han pasado, cómo pasa el tiempo. Y pensar que he abandonado mi querido rinconcito casi uno entero... Bueno, pues me di cuenta de algo al leer. ¡¿Cómo se va tan rápido y cómo se puede cambiar tanto con cada día que dejamos atrás?! En efecto, caí en cuenta de mi propios cambios, como mi forma de escribir, de expresarme, mis frases, los temas, cada uno de esos detalles son diferentes, o al menos algo, ahora. La nostalgia me invade pero a su vez felicidad, es una extraña mezcla de sentimientos en la que no sabes si sentirte bien o mal.
Está por demás decir que el cambio es inevitable, todos lo sabemos y si no, todos nos lo recuerdan jaja. El cambio físico, de personalidad, carácter, pensamiento... En todos los aspectos habrá un cambio y no podemos pararlo. Tantas veces me he repetido que hay que aceptarlo, pero una parte de mí por más que yo no quiera... Se niega, tal como pasó ayer. Sin embargo esa inspiración vino a mí para distraerme y ahora me lleva a mi segundo tema: Las lágrimas.
¿A qué viene el tema? Pues, gracias al Principito de
Antoine de Saint- Exupèry con su frase "
Es tan misterioso el país de las lágrimas..." fue lo único que necesité para ponerme a trabajar. Tenía que realizar un dibujo con un concepto como base, o justificación por llamarle de otra manera, y a decir verdad no tenía ni idea de qué hacer. Al leer la frase asentí mientras las ideas llegaban a mi mente.
Este es el dichoso dibujo :D No tiene título aún pero bueno
Es tan misterioso el país de las lágrimas... Podemos llorar de alegría, de tristeza, nostalgia, melancolía, por un buen chiste, un buen momento... ¡Por tantas cosas! Pero hay veces en las que nos entran las ganas de llorar y no sabemos porqué. Simplemente las lágrimas brotan, se escapan de una en una discretamente acompañadas de sollozos o de un gran silencio. He ahí el misterio, en mi forma de verlo, el descubrir porqué lloramos en esos instantes, si es de alegría o de tristeza. Para ello recurrimos a la soledad, al encuentro con uno mismo, al silencio para que la reflexión acuda a nosotros o nosotros a ella, a todo lo necesario por revelar tal secreto de nuestro interior y así crecer un poco más.
Las lágrimas son, una parte de nosotros que nos recuerdan que somos humanos: vivimos, sufrimos, gozamos... Pero no falta que haya personas que lo vean como una debilidad, una razón de burla, cuando en realidad no es así. No hay persona que no tuviese a una lágrima asomándose, al menos debió haber una sin importar si fue por mero sentimiento o por reflejo de este cuerpo que tenemos. Hay una frase que un profesor nos comentó en nuestra primera clase de fotografía, lamento no poder citarlo correctamente ya que mi memoria es mala pero era algo así: Las lágrimas son la esencia (o el perfume) del alma. Dependiendo de porqué lloramos, se demuestra ese pedacito de nuestra alma, se revela lo que tenemos dentro, cómo somos, qué nos hace sentir, qué nos hace vulnerables...
Para terminar, no tengamos miedo de llorar, ni mucho menos sentirnos avergonzados por hacerlo. Como mencioné antes, somos humanos, ¡tenemos sentimientos! Que no importe el qué dirán si se trata de nuestro sentir, nuestra expresión, ser sensible no es nada malo.
P.D: Ah cómo extrañaba escribir así jajaja. Que descansen :)
